GOBIERNO

Barranquilla, 7 de enero de 2018.- Varios días duró la protesta en municipios del Urabá antioqueño, donde les fueron ubicados 3 peajes en la zona centro de Urabá, en menos de 80 kilómetros, en unas poblaciones donde lo que hay son necesidades básicas insatisfechas que combatir, como el hambre y la miseria que a diario camina por las calles. Fue necesario que llegaran a las vías de hecho con protestas que se tornaran violentas para que el cobro del peaje de Riogrande fuera suspendido.

Las protestas iniciaron luego de que los habitantes habían emprendido todas las acciones cívicas necesarias en contra de la ubicación y operación de los peajes, iniciando con un cese de actividades el pasado 27 de diciembre, pero afirmó un grupo de manifestantes, que una declaración de la Secretaria de Gobierno Departamental de Antioquia, Victoria Eufemia Ramírez, en torno a la anunciada protesta, quien aseguró que estaba financiada por las BACRIM, fue la oportunidad para que las respuestas de los violentos no se hicieran esperar, no obstante que líderes de la Iniciativa Ciudadana y la población en general, que se había manifestado de manera voluntaria sin disturbio, y con un sentir colectivo de Urabá se sintieran agredidos por la funcionaria, situación que fue aprovechada por violentos que emprendieron las acciones que terminaron con los saldos de daño y destrucción.

Fueron 7 municipios los que terminaron siendo afectados luego de que quedaran aislados a raíz de las protestas que terminaron en vandalismo especialmente en los municipios, Chigorodó, Carepa y Apartadó, donde los manifestantes le prendieron fuego a la Alcaldía de Apartadó y las de Chigorodó y Carepa que fueron atacadas en la misma forma exigiendo la reubicación de los peajes.

Mientras los alcaldes, y demás entidades además de civiles, hacían llamados a la calma, esperando la visita de una comisión de alto mando a la región, que solo se logró hasta este sábado cuando ya los hechos habían pasado a mayores.

La situación que se tornó peligrosa fue aprovechada para que un numeroso grupo de violentos manifestantes con el rostro cubierto, incriminaran, intimidaran, agredieran y amenazaran a alcaldes como el de Chigorodó, Daniel Segundo Álvarez, en su despacho de la Alcaldía a quien luego de trepar sobre las paredes y los techos y lanzarse desde una edificación de cuatro pisos, según él  mismo aseguró, le tocó salir escoltado, para huir ante el linchamiento inminente por parte de estos sectores violentos que quisieron atentar contra él. Añadió el alcalde Daniel Segundo Álvarez que la Alcaldía fue saqueada y quemados los archivos. Al alcalde le tocó abandonar el municipio, además quedando este en manos de los violentos.

Igualmente resultaron heridos 9 uniformados de la Policía, incendiados 8 vehículos, entre ellos una patrulla en el municipio de Carepa, donde se movilizaba el comandante de la Policía en Urabá, además de ser agredido tanto él como su escolta.

Además de lo anterior fueron destruidos los peajes de Riogrande, ubicado entre Apartadó y Turbo, Antioquia. Este peaje había sido puesto al servicio el 1 de enero. En este sentido sobre el tema de los peajes y las protestas, el ministro de Transportes, Germán Cardona, había manifestado inicialmente que a pesar de las protestas los peajes no serían retirados, sin embargo después de un Consejo de Seguridad llevado a cabo el viernes en Carepa, la ANI, dio a conocer la suspensión del cobro del peaje, no obstante que no aclaró si será definitivo.

Mientras el alcalde de Turbo, Alejandro Abuchar, afirmó que había solicitado anticipadamente que quitaran el peaje de Riogrande y a cambio le pavimentaran 4 kilómetros de vías urbanas en ese municipio pero le incumplieron, por lo que se levantó de la negociación.

Por otro lado la población de Apartado permanece desde este sábado en Toque de Queda luego de que el alcalde se viera obligado a declararlo así, además de la ley seca en esa región.

Según el Ministro de Defensa Luis Carlos Villegas, luego de un Consejo de Seguridad llevado a cabo este sábado en Urabá, y lejos de asumir su responsabilidad no obstante al reconocer a falta de Fuerza Pública en esa región del Urabá, denunció la existencia de un supuesto titiritero que mueve unas supuestas pandillas, al igual que afirmó la existencia de medios noticiosos promoviendo las revueltas, arremetiendo también contra la libertad de prensa y de expresión, independientemente de que el hecho sea cierto. Por lo que según él, está dispuesto ha hacer las investigaciones, a que haya lugar hasta dar con la clave de quien mueve los hilos.

Afirmó Villegas que fueron capturadas 36 personas quienes están sindicadas de promover los actos violentos ocurridos en esa región.

Finalmente destacar que las vías ya fueron abiertas y la movilización se restableció en gran parte al igual que el transporte aéreo que también estaba suspendido.